No podía dejar de escribir sobre el programa que emitieron ayer en Salvados. Al filo del rescate. Soberbio, un sacacorchos de mente y espíritu. Una sincera y sencilla apuesta por la sinceridad. Al repasar los fotogramas de la emisión me queda claro que la deuda no se va a pagar nunca. Aunque la estemos pagando. Que los intereses y las comisiones de esos préstamos son los que están llevando a países como Grecia a aumentar la deuda a través de cada rescate. A hacernos súbditos de un sistema que nos hará acostumbrarnos a vivir pobres y sin constituciones que nos defiendan. Que defiendan nuestros derechos. Lo único que me queda claro, al final, es que todo esto tendrá que acabar. Lo único que me queda claro, es que lo tenemos que derrumbar. Así que si ya sabemos que con un pequeño gesto se pueden hacer grandes cosas. ¿Por qué todavía permanecemos inmóviles en el precipicio viendo caer las pequeñas rocas a nuestro alrededor y creyéndonos seguros y sustentados por un gobierno que solo nos infunde miedo? El miedo que nos hace creer que con trabajo, esfuerzo y recortes se solucionará algo. ¿Estos mercados se arruinarían si no hiciéramos tal cosa? Está claro que no. ¿Entonces qué hacemos pagando los intereses de una deuda que NUNCA podremos pagar? España, ¿al filo del rescate? ¿el fin de la sociedad como tal? ¿el comienzo de una era de mercados sin personas? Ya lo veremos. Próximamente en sus bolsillos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario