Ya no volveré a mirar igual a un caballo. Según el libro Super Freakonomics, los caballos hubiesen sido a finales del siglo XX el enemigo público número uno. No solo porque la gente moría atropellada (se deduce que en Nueva York moría más gente atropellada por caballos que hoy en día en accidentes de coche) sino porque estos eran responsables de las moscas, estiércol y orina que traían con ellas nuevas infecciones a las ciudades. De hecho, si en el siglo XX se hablaba de contaminación, las personas tenían en mente la contaminación generada por los caballos. Y sus flatulencias, como las de las vacas, son una de las primeras causas de contaminación ambiental del planeta. ¿Distracción o realidad? Lo cierto es que estamos tan ensimismados en nuestra época, nuestro siglo y nuestra cultura que no vemos más allá. Vamos, que dejemos de creernos especiales es la moraleja.
Otra moraleja del día: solo quedamos unas pocas rebeldes, pero el ayuntamiento de Sevilla no podrá con NOSOTRAS. Si hace falta coger el de montequinto se coge el autobús de montequinto, pero no pienso ir a
BRAVA!!!!!!!!!!!!!!!!!
ResponderEliminar