Viendo el anuncio del club de las princesas por sorpresa me da por pensar que a las chicas nos asusta pensar que alguna vez podamos ser una de esas. Que se ponen sombreros, que están a la sombra. Que sonríen cuando se enfadan y que se ponen de luto cuando se sienten distintas. Al final del día solo pedimos un buen masaje de pies, una caricia con la sábana, una canción. Luego lo olvidamos con anuncios de princesas por sorpresa. Y no pedimos tanto.
Es verdad,no lo pedimos, lo ganamos poco a poco. Sólo hay que saber volar y aterrizar después :)
ResponderEliminar