jueves, 8 de noviembre de 2012

Escribir

De toda la mierda que he escrito hoy me quedo con que quiero verte. Ya sea para besarte como para tirarte un escupitajo a la cara por la de veces que he sufrido por no hacerlo.

Nosotros también estuvimos abrazados. Era imposible separar ese abrazo porque en ese momento nos queríamos, o quizás necesitábamos querernos.
Porque ahora lo necesito y lo comparo con ese abrazo que todavía recuerdo, intentando parecer perfecta para encajar con tu cuerpo y sintiéndome pequeña y estrecha entre tus manos, que me hacían morirme de miedo si se ensartaban en minúsculas y delicadas caricias.

Pero de lo que más se acuerda mi memoria es de la luz de tus ojos cerrados rodeándome con destellos castaños y rubios de tu pelo.
Lo recuerdo todo y ya no me lamento porque no se vuelva a repetir más que en mi mente.

Me truena el corazón cuando lo pienso, me tiemblan las rodillas y los huesos, me da vergüenza y me río muy bajito, te quiero a viva voz y en pleno grito.

lunes, 1 de octubre de 2012

It tastes of me



I am 24 years old, I am smart and I am stupid,
I love masculine men but with a tender gaze, yes, I can’t help it,
I love to tease people with strange conversational topics,
I find it very sexy of women to put a bit of red lipstick when they are in a public transport,
I hate you to know me,
I hate the way people critizise you when you’re not around,
I hate critizising people when they’re not around,
I sometimes desperately need someone to hug,
Sometimes I desperately cling to my pillow,
I cry with no reason,
I don’t ever cry in front of you, but I secretly cry for you,
In the bottom of my heart I am careless about everything that has nothing to do with me,
I really care about today’s problems
I don’t really care for newspapers and television,
I watch television,
I am contradictory, I have fun with things I shouldn’t love, I love things I wouldn’t normally do,
I am very active, I procrastinate only with two things,
I love my mother and my sister, even if they are opposite to my character,
I believe myself superior to many people, I know I am not,
I like it when I look myself in the mirror and smile, I like my tan body marks, I love myself,
I don’t ask anything if I truly give, I ask everything if I am not really sure,
I am VERY impatient, I cannot even wait for my meal to heat up in the microwaves and make that “CLING” sound,
I hate my impatience, my lack of perseverance, my thighs and stupid self-help books, among many other things,
I don’t really hate anyone, I couldn’t hurt anyone on purpose, only maybe myself,
I am peaceful and democratic, demagogic and I repeat to myself “I only know that I do not know nothing”,
This is me, a bit distorted by words, which are always in the verge of lie: simple, complicated, unknown and enthusiastic me.


lunes, 3 de septiembre de 2012

Ya no te imagino



Hoy en día no se nos está permitido olvidar. Olvidar es un tabú, todo tiene que quedar reflejado en las redes sociales, en las fotografías, en los escritos, en las canciones, a través de expresiones artísticas o de expresiones mnemotécnicas que nos hagan recordar y recordar todo. Porque todo es muy importante para saber quienes somos y enseñárselo a los demás. Porque vivimos en un escaparate y si han visto algo, no se pueden quedar sin saber algo más. Como por ejemplo cuando cambias de ciudad, de vida, de pensamiento o de aspecto físico. Todos tienen que saberlo para saber quién eres, en quién te has convertido y poder mantener relaciones interpersonales con ellos.
Fracasamos al no decir, al no contar, al esconder. El éxito, hoy en día, nos lleva a una especie de patetismo expositivo mundial, globalizado, que nos obliga, sin quererlo, a demostrarlo a través de estas expresiones y estos medios. Te digo lo que soy, para que veas que soy mucho más que no puedes ver. Pero al final, y sin remedio, sientes haberlo enseñado todo o haber visto todos los momentos de esa persona que ya no puedes imaginar.

miércoles, 15 de agosto de 2012

La educación prohibida (documental)


En vez de inculcar, crear y recrear.
La educación, ese maravilloso regalo que sin embargo desde sus comienzos estaba envenenado. En la era del despotismo ilustrado los monarcas absolutistas “conformaban” la sed y ansias de libertad, igualdad y fraternidad de la revolución francesa y los acomodaban a sus ideales, estos mismos monarcas dirigían a un cuerpo docente que les servía de canal para obtener súbditos de un sistema al que no estaban dispuestos a renunciar. El mismo Napoleón apoyó esta propuesta de educación pública, gratuita y obligatoria porque pretendía “dirigir el parecer de los franceses”.
Si nos acordamos del mito de la caverna de Platón en el que unos hombres permanecen encadenados dentro de una cueva sin poder ver el mundo exterior ni relacionarse con su entorno y sometidos a un pensamientos condicionado por las sombras de cosas que los hombres del exterior querían que viesen, podemos obtener una clara semejanza con las escuelas de hoy en día, de muros cada vez más altos, con premios y castigos, con una información canalizada.
En la historia del ser humano no existía la educación obligatoria hasta que los prusianos la inventaron. En una de las etapas filosóficas más fructíferas, como en la Antigua Grecia de Platón y Aristóteles, las Academias eran lugar de preguntas y de dudas, hoy en día las escuelas se centran en las respuestas, lo que hace que los niños vean minorizada su creatividad y su imaginación en pos del resultado, convirtiéndolos en sociedad consumista en la que todo vale para llegar a ser alguien en la vida. Yo ya soy alguien, piensa un niño. Pero nadie le escucha. Un sistema de calificaciones injusto, en el que solo se tienen en cuenta los conocimientos sobre un tema limitado que separa a los niños entre inteligentes, aceptables o mediocres. El mismo sistema prusiano dividía a los niños por edades (sistema que aún hoy mantenemos) haciéndoles creer que eran todos iguales y haciéndoles ver, por lo tanto, que mientras más diferente de tu grupo, peor eras y más tenías que corregirte. Me pregunto por qué a pesar de tener una sociedad tan distinta de la de entonces, seguimos con un sistema erróneo que se repite y que cree que los niños son seres vacíos que tienen que ir rellenándose con conocimientos inútiles que olvidarán inevitablemente.
El 90% de los niños menores de 5 años podrían considerarse unos genios a efectos prácticos, si nos damos cuenta no hay un niño más curioso que otro, TODOS quieren aprender, pero no todo tienen las mismas herramientas ni mucho menos todos obtienen las mismas respuestas. Somos nosotros, quienes con nuestro mundo educativo de respuestas predeterminadas no dejamos que se equivoquen, erren o aprendan a levantarse por sí mismos, destruyendo su espíritu creativo en el camino y dejando, 15 años después, un 10% de ese 90% de genialidad.
Los niños, al estar sujetos a la repetición, al tedio y a un esquema predeterminado van perdiendo la curiosidad y el interés por aprender cosas nuevas.
¿Qué pasaría si descubriéramos a tiempo una pasión en el niño? Obtendríamos mejores resultados a largo plazo. Hacer las cosas con la mente, corazón y manos es lo que nos convertirá en un buen zapatero o cirujano, sintiéndonos independientes y orgullosos de lo que hacemos, sin que nadie tenga que cuestionar si lo que hacemos es digno de nuestra posición, clase social o expectativas familiares.
Ahora pienso que si en la escuela hubiesen fomentado mis aptitudes vocales o musicales adecuadamente y no solo a través de teoría y prácticas que nos convertían en una amalgama de niños tocando con la flauta “Carros de fuego”, hubiera podido destacar en la música, o quizás en la escritura, en teatro o en danza. O pensemos en la fotografía. Cosas que nos rodean pero con las que no estamos en contacto hasta que somos libres, hasta que salimos de las 8 horas de escuela, 2 horas de lectura y una infinidad de tareas tediosas regidas por pautas inculcadas en los años 50 para animales como ratas a través del sistema de estímulo-reacción. ¿Demasiado tarde? Existen por ahí escuelas integradas que participan de una educación posible pero, desgraciadamente, cada vez más en confrontación con el sistema de control que ejerce sobre nosotros la ecuación pública (y privada en el noventa y nueve por ciento de los casos). No nos rindamos, como decían por ahí, el ser humano es esencialmente bueno, y yo añado que lleno de dudas que nos llevarán a la respuesta.

martes, 19 de junio de 2012

Para seguir cuerdos


Para seguir cuerdos leer los libros en lugar de los periódicos.
Cambiar el autobús por un paseo.
Mirar a los ojos en vez de al suelo, lamer los besos y no las heridas.

Para seguir en tu sano juicio comulgar con mis pasiones y no con mis creencias. 
Mostrarme tus credenciales
esconderme el pasaporte.

Para seguir cuerdos.
Para seguir en nuestro juicio sin jueces. Que sentencien la locura que nos torna prudentes.
Convertirnos en chiflados que derriben las miradas de la multitud.
Y quererte.

sábado, 16 de junio de 2012

Una noche exactamente igual de diferente


Entramos en aquel bar pensando que sería diferente. Solo había un par de chicas borrachas y hombres invitando a pintas. El camarero parecía estar buscando algo que se le había perdido, quizá el número de teléfono de una de las chicas borrachas. Nos reímos, hablamos en serio y salimos de allí fumando el aire por el camino. Ese bar era diferente. En ese momento me di cuenta de que ya no era lo mismo. De que algo había cambiado y mi vida solo pertenecía a la ciudad, pero ya a ninguna persona.

lunes, 4 de junio de 2012

Oda al pizzaiolo


El chico de la pizzeria me sonríe de oreja a oreja cada vez que entro por la puerta. Tiene los ojos cada vez más brillantes y azules y no puedo dejar de reirme cada vez que me acerco.
Me siento en un rincón para alejarme de él pero en seguida me pongo a mirar sus ojos fijos en mi pelo. Me lo imagino recorriendo 1000 kilómetros descalzo por mi sonrisa y los ojos se me iluminan.
Es solo el chico de la pizzeria, pero es mi chico de la pizzeria.
El que quizás se merezca una oda, al que quizás desnudaría a solas. Una contradicción, una espera, una pasión. Y después, una dulce y calmada entrega.

miércoles, 30 de mayo de 2012

"Ya no le quiero, es cierto, pero tal vez le quiero"


Sin dudas, se asfixiaba. Y solo le salía otro nombre por la boca. “¿A quién amas? joder, ¿a quién amas?”. De rodillas, agarrándose al pollete de la cocina se hacía la misma pregunta una y otra vez. Ella debería haber pronunciado otro nombre, pero en ese momento, en ese instante en el que las almas buscan reposo y tranquilidad, en el que deberían recoger los momentos más significativos de su vida en fotogramas, ahí le traicionaron los nervios, el corazón.

lunes, 21 de mayo de 2012

Próximamente en sus bolsillos

No podía dejar de escribir sobre el programa que emitieron ayer en Salvados. Al filo del rescate. Soberbio, un sacacorchos de mente y espíritu. Una sincera y sencilla apuesta por la sinceridad. Al repasar los fotogramas de la emisión me queda claro que la deuda no se va a pagar nunca. Aunque la estemos pagando. Que los intereses y las comisiones de esos préstamos son los que están llevando a países como Grecia a aumentar la deuda a través de cada rescate. A hacernos súbditos de un sistema que nos hará acostumbrarnos a vivir pobres y sin constituciones que nos defiendan. Que defiendan nuestros derechos. Lo único que me queda claro, al final, es que todo esto tendrá que acabar. Lo único que me queda claro, es que lo tenemos que derrumbar. Así que si ya sabemos que con un pequeño gesto se pueden hacer grandes cosas. ¿Por qué todavía permanecemos inmóviles en el precipicio viendo caer las pequeñas rocas a nuestro alrededor y creyéndonos seguros y sustentados por un gobierno que solo nos infunde miedo? El miedo que nos hace creer que con trabajo, esfuerzo y recortes se solucionará algo. ¿Estos mercados se arruinarían si no hiciéramos tal cosa? Está claro que no. ¿Entonces qué hacemos pagando los intereses de una deuda que NUNCA podremos pagar? España, ¿al filo del rescate? ¿el fin de la sociedad como tal? ¿el comienzo de una era de mercados sin personas? Ya lo veremos. Próximamente en sus bolsillos.



martes, 8 de mayo de 2012

Negarme a la ilusión


Salgamos de esta cripta
Que es la vida
Cifremos los secretos de la nada
Que riegue ya el rubor tus dos mejillas
Y que me colmen el pecho tus nostalgias.

Cuando uno más nunca es ya suficiente
Hacemos del plural nuestro presente
Palpamos el deseo con la mano
Lo tornamos altivo, indiferente
Lascivo y castellano.


Negamos presenciar omnipotencias,
Secamos nuestras lágrimas creyentes
Con valientes labios
Con trémulos placeres
Que nos dejan el pecho en la indigencia
Caen nuestras leyes en esta pobre inconsciencia.

Y adivinan la palabra
Que no quedará resuelta
Por deshacer entre los dedos
El prejuicio y la torpeza
De querer sin saber amar
Y de amar sin negar la belleza.

domingo, 6 de mayo de 2012

No hay más miedo



Las personas, en realidad, no creemos en la suerte. Por eso le damos la categoría de pulseras, amuletos y libros de chamanes. Por eso, cuando nos dan a elegir un deseo en la tarta de cumpleaños todos pedimos deseos fugaces, inmediatos, que puede que no marquen el resto de nuestras vidas si no los conseguimos. Nadie pedirá salud, porque la tiene y cree en ella, confía en ella. Todo el mundo pide suerte.

lunes, 23 de abril de 2012

Déjame que me enamore

- Déjame que me enamore de ti,
   aunque solo sea esta mañana
   aunque solo sea este instante.

-No puedes, ya lo sabes

- Corrijo, no podemos. Yo ya me estoy derritiendo
   con las fraguas de tus ojos, como si me
   acribillaran con torturas que acabaran en éxtasis.

- ¿Por qué no dejas de soltar poesía por la boca?
   ¿Por qué no mejor callarte y besar?

- ¿Por qué no simplemente dejarte enamorar?
   Sí, te beso y bien sabes que así podría ser feliz,
   pero en el momento en el que me devolviste esa
   mirada felina decidiste involucrarte, lo que pasa
   es que tienes miedo.

- ¿A qué?

- A dejar el amor viejo y querido, tu vida y tus costumbres, el te quiero
  por las mañanas, las plantas y las flores de la ventana, sentirte niño
  jugando en el parque como una excusa, pensar en el amor nuevo
  mientras planeas tu tarde, saber que lo nuestro es ya....
  inevitable.

jueves, 12 de abril de 2012

Yo, mi, me, conmigo


Porque todos tenemos un momento de egocentrismo, y no viene nada mal, oye..


Somos diferentes, ¿lo somos?


Dejé de hacer lo que me hacía especial cuando descubrí que todo el mundo lo hacía para sentirse especial. Dejé de cruzar solo por las líneas blancas del paso de zebra, dejé de comprar piruletas, de cantar por la calle. Dejé de de mirar a los ojos a los viandantes. De cerrar los ojos mirando al cielo. Dejé de bailar en los semáforos en rojo, de bajar las ventanillas del coche y cantar a pleno pulmón. Moraleja: dejas de ser especial cuando dejas de hacer lo que todo el mundo hace. Moraleja más profunda: haz lo que quieras.

martes, 10 de abril de 2012

Extraño amor

Todos me escriben cartas de amor. Me declaran la constitución y los mandamientos del deseo, de la fidelidad. De la felicidad. Me besan y me proponen noches de pasión. Todos me escriben notas de amor, menos tú.

Todas te escribimos cartas de amor. Te declaramos al oído los más bellos versos y el más recóndito calor. Te besamos y te proponemos mil y una noches de ilusión. Todas te escribimos notas de amor, menos ella, tu amor.

viernes, 6 de abril de 2012

Alone

I cling to my pillow as a very fanciful object. I don’t want to sleep alone tonight. I can’t move. I can’t breathe but this infected air of mine tonight. I don’t want to sleep alone. Not tonight. I need you to read me. Cry me. Miss me. But don’t let me be alone, because I feel lonely, just for a while. All night long. I will be ambling in this little space. Don’t let me unravel my feelings. Don’t let me glimpse the end of the night without your presence. Don’t let me see my unconcealed frailty and have me crawling on the flagstones of this very cold floor. Because I need your chest to slip down mine. Because I need your arms, tonight.

martes, 3 de abril de 2012

Ya mentimos a diario

Tengo miedo de olvidarte. De no ver tu cara por caprichos del destino, que es muy caprichoso. De verla demasiado y olvidar la forma de tus ojos, de tus labios, el color de tu piel y tu voz. Tengo miedo de quererte. De dejarme ir y no verte.

Tengo miedo de perderte, de que olvides y me destierres, sin quererlo y con descuido. Que me dejes de hablar, de eso tengo miedo. De que no desee más oírte, y sentir lo que ya siento. Es muy poco, pero es tanto, ese pozo y este llanto.

Olvidaremos, es probable, aunque en estas palabras te siento mío y ya nunca más podré liberarte. Porque sí, porque me rozas con tu voz y te detienes a mirarme. No te pones nervioso y me observas arrancándome la piel, porque sí.

De olvidarte tengo miedo. Tengo miedo, y tú lo sabes.

lunes, 26 de marzo de 2012

. Tú

Y es que ni siquiera quiero quererte. Quiero llevarte a mi rincón favorito. Quiero jugar. Mirarte de reojo. Quiero sonreírte y besarte en la cara. Hacerte cosquillas y ver las montañas, los cielos. Leer juntos en algún banco del parque, tumbarnos al sol mientras te canto canciones inglesas. Que me relates tu día, que me cuentes tu vida. Quiero escribirte una nota y mandarte un beso de pintalabios rojos. Comportarme como una adolescente con un amor oculto rozándote en la esquina. Comerte las comisuras y lamerte las heridas. Quiero olerte el cabello, tocarte la nuca y la nuez, perderme en tus ojos cristalinos y en tus orejitas de duende. Verte fumar y que me pases la mano por la espalda. Y me digas “en qué buen día la casualidad se cruzó en nuestro camino”. Quiero que me enseñes y que me hables de poesía. Que te rías con mis cosas y que te contagie mi alegría. Llenar mil fotos y mil sueños con tu cara. Preparar un viaje que nos transporte al infinito. Sentir tu abrigo. Quedarme quieta. Verte pasar. Te vas. Ha sido maravilloso y todavía estamos juntos. Aunque nunca lo estemos. Me voy, pero tú quédate esperando. Y es que ni siquiera quiero quererte. Porque ya lo hago.

sábado, 24 de marzo de 2012

Sexo y/o amor


Entré en su cama 20 minutos después de entrar en su casa. Le traje tabaco y él me recibió con un beso y una sonrisa. La casa, desamueblada. La cama, desordenada. El sofá, cómodo y los pies, descalzos.

Cuando hago el amor con alguien suelo olvidar la mayoría de las cosas, suelo quedarme, al final y sin remedio, con una idea general de la persona. Pero él fue diferente. Este chico maduro y extranjero hacía que desprendiese electricidad sin apenas haberme tocado. Seguro que ahora estaréis pensando en alguien con quien hayáis tenido una relación de ese tipo. La hayáis o no consumado. Lo mío fue un amor de verano. En este caso lo podemos llamar sexo, pero yo también lo llamaría sensualidad. Entendámonos. Sensualidad no es amor. Es una especie de complicidad que no se desarrolla, si no que se tiene con alguien. Una mirada, una sonrisa, una caricia, pero nunca amor. Ganas de volver a verse, hasta que dure.

Lo recuerdo muy bien. A este chico le gustaba chuparme la cara mientras nos revolvíamos entre las sábanas. Al principio, como en todo, me extrañó. Luego me dijo:

- Qué bien sabe tu cara, ¿te echas alguna crema o algo?- me espetó con fruición mientras me lamía la mejilla.

- Si, una crema hidratante- le dije para ocultar que lo que en realidad estaba degustando era una emulsión de maquillaje italiano.

Era así. Nos lamíamos, nos hacíamos, nos deshacíamos y volvíamos a vernos y a echarnos de menos. Hasta que el verano acabó y me puse a escribir acerca del chico que me lamía la cara.

martes, 20 de marzo de 2012

Entre tu lengua y la mía creamos un idioma

No sé qué pasa contigo en el papel,
cada vez que meto tu pronombre,
posesivo o cualquier tú,
me meto en tu piel.
Y me río.

Necesito perderme en un sueño
en tu sonrisa
en la clara fantasía
en un roce de mejilla.
Y sonreír.

Y quizás, ver algo más,
caerme en el agujero
para caer en la oscuridad de ti.

Te pregunto y me sonríes
y te entiendo,
y me pierdes
y me hablas y ya sabes que me tienes.

Porque tus palabras, no,
no las he escuchado,
pero tu risa
me retiene a tu lado.
Y yo, tonta,
te sonrío.

viernes, 9 de marzo de 2012

Te busco, te pienso, te siento

Añoro las noches en que nos vimos,
cuando posabas los pies sobre el edredón
y me preguntabas por qué la luz era tan fuerte,
por qué había una luz cegadora, amor mío,
que entraba por la persiana
y formaba estrellas en nuestro techo,
que derramaba lágrimas en nuestro pecho.

Así me fui acostumbrando a tí,
y es que olvidarte era muy fácil
hasta el día en que no te pude ver
no a tí,
no al destello que presionaba contra mi piel
y mi pelo, y mi cuello.

Pero hoy te busco, me has visto preguntando por tí,
has estado conmigo, más que en sueños
pero nunca en la luz del día en que ya no te vi,

Solo en sueños, y apenas oigo tu secreto
ya sé, que solo en sueños, te tengo
y me da miedo.

La vida en libro

Hoy me acabo de enterar de que Charles Dickens rellenó su biblioteca con títulos de libros falsos, que en realidad, no eran libros escritos por nadie. Sus títulos podían fácilmente despertar el interés de diversos lectores. Lo cual me da que pensar. Quizá es mejor escribir el título que el libro entero. La forma antes que el contenido. Captar la atención como un experto en publicidad literaria, humana o de mercado. He aquí mis propuestas de libros inventados:

Historia de la sonrisa de un niño
7 minutos en tu boca
Canciones de guerra
Tú, Ecce homo
La batalla de los versos
Mañanas francesas
Cuando despiertas en mi cama

Ahora solo me falta escribirlos 

domingo, 19 de febrero de 2012

Ayer te besé

Ayer te besé, con ganas, sin inspiración, sin ataduras.. con pasión.
Te besé en la cara, en el mentón, te besé consciente de esa prematura atracción.

Sin sentir nada, ni siquiera amor.

Me paro a pensar que ayer me besaste, y sé con certeza que algo falló..
no supiste besarme ni una pizca el corazón.